inicio de Curso - E.G.B time - años 80

Cada inicio de curso sucedía lo mismo. Un desfile de estuches nuevos invadía las mesas y entre ellos la estrella de los estuches , los Pelikan.
Abrir un estuche Pelikan en el inicio de curso equivalía a sacar un iphone 4 de nuestros días. Todas las miradas se centraban en la caja de plástico con pegatina con motivo celeste en su superficíe. Esos rotuladores delgados con un extremo que pintaba fino y otro extremo que pintaba grueso y que duraban menos que la caja de rotuladores Carioca, esa donde salía un pistolero que giñaba un ojo y del cual siempre pensé que tenía intenciones pederastas.  La versión de lujo Pelikan traía tres pseudo rotring en color azul junto a su botellín de tinta. El único de los Rotring Pelikan que sobrevivía era el de en medio y es debido a que el más delgado, el que parecía una aguja, servía para jugar a los tatuadores cuando te aburrías en clase de matemáticas y el más gordo servía para llenar con tinta tu nombre en el pupitre, nombre de ponías usando la punta del compás. Oficialmente la muerte del estuche Pelikan se producía cuando le arrancabas la pegatina de la tapa. Nunca llegabas a sacarla del todo y siempre quedaban restos blanquecinos de papel y eran la excusa perfecta para pasarte la clase de "natus" dándole a la uña. Luego los cromos  pegatina de futbol se ocupaban de decorar el estuche aunque el resultado dejaba bastante que desear.